EN LOS ÚLTIMOS TRES AÑOS, CERCA DE 16 MIL TRABAJADORES HAN SIDO CAPACITADOS GRACIAS A LA FRANQUICIA TRIBUTARIA, BENEFICIO ESTATAL QUE BUSCA ATRAER, GENERAR Y RETENER EL TALENTO QUE LAS EMPRESAS NECESITAN DE ACUERDO A LAS REALES NECESIDADES DE LA INDUSTRIA DE LA CONSTRUCCIÓN.

Por Beatriz Espinoza_Fotos gentileza CChC. 

«Al invertir en capacitación, las empresas pueden aumentar su productividad, reducir los costos de posventa, mejorar el nivel de sus construcciones y agilizar sus procesos. Además, están contribuyendo a elevar el estándar del mercado laboral del sector, un objetivo que solo podemos alcanzar en con­junto. Estos esfuerzos hacen que la industria se torne más atractiva e impacte favorable­mente la calidad de vida de sus trabajadores y trabajadoras, pues una empresa que ca­pacita contribuye en reconocer y valorar a sus trabajadores’; reflexiona Juan Armando Vicuña, presidente de la CChC, sobre el uso de la Franquicia Tributaria utilizada por las empresas socias de la institución gremial.

El incentivo tributario del Estado está basado en la Ley 19.518 y permite financiar la capacitación, evaluación y certificación de competencias de trabajadores de una organización, sin costo para el empleador. Las empresas que se acogen a este beneficio tienen la posibilidad de descontar del Im­puesto a la Renta hasta el 1 % de la planilla anual de remuneraciones de trabajadores, de acuerdo a los alcances, límites y montos que establece la normativa por gastos incu­rridos en acciones de capacitación, autori­zadas por SENCE.

Según Juan Armando Vicuña, en com­paración con otras actividades de la econo­mía, la productividad de la construcción se ha visto estancada, entre otras causas, por la escasa disponibilidad de capital humano con las competencias requeridas por el sec­tor. «Como gremio consideramos que la for­mación y el desarrollo continuo de las y los trabajadores es uno de los principales agen­tes de cambio y desarrollo, convirtiéndose en uno de los pilares fundamentales de la productividad y sostenibilidad’; afirma.

Para lograrlo, la Corporación de Capa­citación de la Cámara Chilena de la Cons­trucción, OTIC CChC, es la encargada de hacer posible este desafío, actuando como intermediario entre las empresas afiliadas al gremio y los Organismos Técnicos de Capacitación (OTEC), que están facultados para enseñar conocimientos y habilidades a través de cursos presenciales y plataformas digitales.

MILES DE TRABAJADORES CAPACITADOS

Dada la gestión del OTIC CChC, en su intermediación con las empresas socias, es que desde el año 2020 son 15.534 los traba­jadores capacitados a través de la Franquicia Tributaria, que pueden acceder a más y mejores oportunidades de empleabilidad. Con esto, el OTIC permite vincular las ne­cesidades concretas de capital humano que tienen las empresas socias con una pro­puesta de formación pertinente, que contri­buye en los aspectos técnicos y que fortale­ce las habilidades sociales y el liderazgo de las personas.

«A partir de un entendimiento de las ne­cesidades concretas de capital humano que tienen las empresas constructoras, identifi­camos la mejor estrategia de desarrollo del talento y la conectamos con la oferta forma­tiva disponible, privilegiando aquella que incorpora innovación en nuevas metodo­logías de enseñanza y herramientas inten­sivas en uso de tecnologías, para maximizar la transferencia efectiva de conocimientos al puesto de trabajo, y que, al mismo tiem­po, nos permita preparar mejor a las y los trabajadores a la automatización e incorpo­ración de nuevas tecnologías en los proce­sos constructivos’; explica el gerente general del OTIC CChC, José Esteban Garay.

Sin embargo, según el ejecutivo, en la industria de la construcción aun se invierte poco en capacitación. Los números mues­tran que, de un potencial de $ 45.000 millones que se podrían aprovechar en la forma­ción de trabajadores, solo se usa un 17% de esos recursos, que por lo general emplean las grandes empresas. Por esta razón, desde el OTIC CChC están enfocados en sumar a más empresas constructoras y contratistas de menor tamaño, para que aprovechen las garantías de la exención tributaria, e impac­ten en la productividad de sus empresas y las capacidades de sus trabajadores y traba­jadoras a través de la formación laboral.

DERRIBANDO MITOS 

Hay dos grandes mitos en relación a la Franquicia Tributaria para capacitación, según el gerente general del OTIC CChC. El primero, señala, es que capacitar es buro­crático por los trámites ante el Servicio Na­cional de Capacitación, el Servicio de Im -puestos Internos (SIi) y otras instituciones. Sin embargo, el OTIC se encarga de toda la gestión administrativa, para que las empresas hagan un correcto uso de los recursos y no tengan dificultades en sus declaraciones ante el SIi, accediendo de manera simple al beneficio tributario. De esta manera pue­den enfocar sus esfuerzos en su negocio.
Además, agrega, se dice que es caro ca­pacitar, pero es el Estado y no las empresas quien asume el costo de las actividades de capacitación y certificación de competen­cias de las y los trabajadores, al descontar el monto total aportado en el proceso de de­claración de renta, independiente de si éste se utilizó completamente.
El presidente de la CChC invita a todas las empresas socias a utilizar este beneficio tributario en el año 2024. «Los apoyará en aumentar la productividad de sus trabajado­res y trabajadoras, dado que estarán poten­ciando el desarrollo de su capital humano. iCÓmo hacerlo? A través de nuestro OTIC CChC, que está 100% a disposición de nues­tras empresas’; señala Juan Armando Vicuña.